¿A quién le gusta la infidelidad en una relación de pareja o intima?

¿Tiene usted una cierta presión social o familiar con respecto al tema de la infidelidad en su relación de pareja? ¿Busca usted una cierta aprobación o código moral con el fin de evitar encontrar sus propias respuestas, sus propias verdades con respecto a la infidelidad?

¿No se siente cómoda con respecto a lo que los demás podrían juzgarle, culpabilizarle o negarle, si usted adopta un punto de vista diferente al de ellos?

La fidelidad no es una obligación, sino una ocasión para crear bienestar en su relación amorosa. 

 

 

 

¿Tiene miedo de pronunciarse y ser juzgada?

¿Busca usted una cierta satisfacción en este artículo o bien le gustaría descubrir lo que es verdad para usted? Si usted opta por la primera opción, entonces usted es controlada por los demás. Pero si usted opta por la segunda opción, entonces podremos ver juntas, sin juicio, lo que con toda seguridad usted ya conoce, pero que el miedo le impide ver.

Como yo creo, usted no está cómoda con las preguntas que sugieren su implicación personal o su punto de vista, ya que usted ha estado condicionada a obedecer y de esta manera tener las mismas respuestas que los más fuertes, los más instruidos, los más hábiles, entonces yo voy a decirle lo que es para mí la infidelidad. Es un tema delicado, ¿no es cierto?

 

 

¿Qué significa la infidelidad para mí?

Observo que existen dos situaciones en la infidelidad; Engañar a mi marido o ser engañada por mi marido. ¿Estamos de acuerdo?

 

Engañar a mi marido. Observo que somos libres pero eso no quiere decir que no hay consecuencias en lo que hacemos. Si en mi relación con mi marido, me hace bien gritarle e insultarlo, eso no quiere decir que a él también le hace bien. Solo él decide lo que está bien o no para él.

Si yo engaño a mi marido y eso me hace bien, pero a mi marido no le gusta eso, entonces yo podría esconderme y evitar que lo sepa. No para evitar hacerle daño, pero para poder seguir engañándolo. Entonces, yo no deseo respetar los sentimientos de mi esposo, me importa un comino por así decirlo!

¿Pero qué es lo que lanza mi deseo de engañarlo? ¿Es tan importante? yo veo que es importante para mí, si quiero justificar mi comportamiento, si quiero culpabilizarlo para tener razón, por decirlo así. Pero lo que importa es mi presente y mi futuro y no el pasado, las razones pasadas de por qué lo engañe.

Podría decir que él no es atento, que él siempre está con sus amigos, etc. Pero ¿por qué yo no he cuidado de la relación con mi marido cuando él vivía momentos difíciles o situaciones de seguridad para crear juntos ocasiones de estar atento a mí y también yo de él? ¿Por qué no hice nada para hacerlo tomar consciencia y actuar juntos (y no sólo él)? ¿Estoy en relación con él o estoy separada de él?

¿Somos una pareja o somos dos seres que viven, en apariencias, juntos, pero como los hierros que componen los rieles de un tren que nunca se unen?

Para mí el tema de infidelidad es simple. Cuando tenemos una decisión importante a tomar en nuestra relación, la cuestión principal es querer comprender ¿si las consecuencias crearán bienestar a todas las personas implicadas en nuestras relaciones? Creer que eso está bien para otro es una mentira o una pereza para intentar convencerse de que está bien.

Yo debo tomar consciencia de los sentimientos de mi esposo con el fin de saber si eso le hará daño. No hacerle la pregunta, es cometer adulterio antes de haberme acostado con otro hombre!

 

 

Ser traicionada por mi esposo. Esta situación es muy difícil a comprender para mí, porque si él me engaña yo no lo sabré, entonces probablemente él lo hará a escondidas. Sin embargo, tenemos una relación basada en el respeto y la aceptación de nuestros sentimientos.

Si me entero que él me engaña, entonces no niego mis sentimientos y si me siento mal, es porque me hace daño. Yo soy la única autoridad de mi vida. Lo que los demás piensan o dicen, no es su problema. Yo respeto mi verdad, sin juzgarme.

Para quitarme ese sufrimiento, soy consciente que la primera cosa a hacer es no hacer nada a partir de un estado incómodo, sino aceptar la infidelidad. Entre más atenta esté a ese estado, entre más tenga la intención de comprender mis comportamientos inconscientes tal y como son y no como deberían ser, más que ese sentimiento incómodo desaparecerá para ser reemplazado por otra cosa, por una nueva verdad que no viene del mundo exterior que está condicionado por el miedo y la culpa.

En ese instante tengo una elección consciente entre dos verdades; vivir con la infidelidad o vivir una nueva verdad. Mi elección es mía y no suya con el fin de vivir las consecuencias de mis elecciones conscientes. Nunca más, elegiré según lo que los demás me dicen hacer. No puedo evolucionar si elijo lo que los demás quieren que yo haga.

Según mi consciencia actual y no necesariamente la suya, la relación con mi esposo se termina en ese instante y no hay porque perdonarlo por lo que ha hecho, ya que acepto lo que él es en ese instante. Lo que cuenta es ver si él se perdona (prefiero la palabra comprender) por haber creado una división en la relación y luego hacer una nueva elección o no.

De esta manera, la relación con mi esposo ya no es una relación íntima, especial y diferente que aporta oportunidades para evolucionar. Entonces, lo libero para que viva sus experiencias basadas únicamente sobre sus deseos del cuerpo mientras que yo elijo nunca más estar en relación íntima y amorosa con él.

 

La infidelidad no es una acción, es un pensamiento primero!

La cuestión a saber si es bien o mal engañar, traicionar a su esposo o su esposa, es una respuesta personal que no tiene verdad en la mente condicionada de la gente, tampoco en un artículo escrito por una celebridad o cualquier otra persona. La respuesta está en sus sentimientos a cada instante y nadie en el mundo puede decir si le hace daño o no a usted.

Yo comprendo que desde su infancia, los adultos lo han manipulado inconscientemente para negar sus sentimientos, pero ya es tiempo de retomar su poder, a menos que usted esté bien así. Es su libertad de elección.

Acepte y respete sus verdades, por amor de Dios! Confíe en sus sentimientos y no tenga miedo de la gente autoritaria que buscan controlarle para compensar su falta de inteligencia y su falta de acción en las relaciones con el fin de obtener sus deseos egoístas. Ellos dependen de usted y buscan hacerle creer lo contrario para manipularle con las palabras.

Es así como creamos los problemas y las confusiones, ya que nuestra verdad es lo único que cuenta y si estamos en relación intima o amorosa con una persona, entonces lo que cuenta es jamás negar sus sentimientos, sus verdades, con el fin de entenderse bien.

 

 

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Traductora, co-autora, y adaptadora de contenidos editoriales de sitios web, madre y esposa dedicada al hogar el cual hace parte de mi felicidad y me permite construir a cada día la vida que elegi ser como esposa, hacer como madre y tener como hogar. .