¿Por qué la gente busca culpables para los problemas sociales?

Si usted busca o tiene el deseo de encontrar culpables para los problemas sociales o cualquier otro tipo de problemas en sus relaciones, es que usted no tiene la intención de comprender un problema y menos aún, de trabajar para darle fin. ¿Es que la justicia es ser justo, sin importar lo que hagas y no de juzgar una acción hecha creyendo producir justicia?

¿Cuántas personas prefieren aportar una conclusión final, un juicio rápido sobre la realidad y de esta manera afirmar que los demás están equivocados, son culpables y así tener razón y limpiarse la consciencia?

Y probablemente, la causa profunda de todos nuestros problemas sociales podría ser creada por aquellos, que justamente, juzgan a los demás para deshacerse de toda forma de responsabilidad personal en las relaciones con sus semejantes.

¿Está usted perdiendo una ocasión para crear algo bueno en sus relaciones sociales?

 

 

¿A quién le gusta ser juzgado por los demás?

La culpabilidad es un veneno que impide a la gente ser responsable y de esta manera inventar toda clase de excusas para justificarse con el fin de no sentirse herido por los demás con respecto a un error, una falta cometida. ¿Pero quién determina si un error o una falta es cometida? ¿Quién califica lo que está bien o mal? ¿Los demás o usted mismo?

Todos vivimos el juicio de los demás y para liberarse de él, basta con aceptarlo por lo que es. El juicio es una invención creada por el hombre con el fin de someter a sus semejantes a aceptar por la fuerza, por medio de la culpabilidad, es decir por medio del sufrimiento psicológico, para controlar su mente por medio del condicionamiento con el fin de exigirle llenar las obligaciones, las condiciones, las reglas de aquellos que buscan un cierto poder con el objetivo de obtener algo de usted.

El juicio no es la observación. Juzgar es concluir dictando una sentencia. Como consecuencia, usted no puede evolucionar en consciencia en el juicio. Y por lo tanto, todos estamos en un proceso de creación, que es infinito. Y en el momento de juzgar, lo que usted juzga ha dejado de existir!

 

¿Quién le ha enseñado a juzgar?

¿De dónde viene esa vergüenza de sí mismo cuando hacemos un error? ¿Es que los niños que aprenden a caminar, tienen vergüenza, les da pena cuando se caen y luego se levantan? ¿Es que nuestros padres y profesores que enseñan el juicio para controlarnos mejor, dominarnos, con el fin de satisfacer su deseo de poder creyendo que educar un niño, es ayudarlo a no amarse?

¿Le gusta tener vergüenza, pena, luego de haber cometido una falta? ¿Le gustaría poder elegir una nueva decisión y acción después de haber cometido una falta sin ser juzgado? ¿Si descubrimos quién crea los problemas sociales en el planeta, no sería inteligente y sabio, no portar un juicio por hábito aprendido de los demás? Nada hiere más que el juicio de los demás en una relación. Usted no tiene más que sentir una sola vez el juicio para comprender que eso no afirma el amor.


El juicio es una condena que usted cree verdadera

El juicio es entonces, una ilusión, un mito profundo, una realidad que casi todo el mundo cree verdad. Todos ustedes creen que nacieron imperfectos y que usted debe hacer algo para ser perfecto.

En consecuencia, usted cree que los demás conocen las cosas que hay que hacer para ser perfecto en lugar de simplemente observar que Dios no crea nada imperfecto.

Sería inapropiado juzgar o negar el juicio, ya que en ausencia de la posibilidad de elegir, ninguna elección es posible para expresar su libertad.

Sin el juicio, usted no puede tener la elección entre lo que es el juicio y lo que él no es. En realidad, es aceptando el juicio por lo que él es, que usted puede hacer entrar en existencia una nueva toma de consciencia, un nuevo estado de ser de lo que usted es, verdaderamente.

La consciencia de elegir entre el juicio y la aceptación de lo que es. Usted nació en un estado de perfección y usted lo será eternamente.

El proceso de la vida, que es un proceso continuo de creación, es justamente comprender que los errores no son fracasos, sino un medio para acercarse al éxito. Sin embargo, la educación de los padres y los profesores es deficiente, ya que ellos no son conscientes de su juicio hacia los niños. Las consecuencias del juicio y de la negación de sí mismo, ha producido un condicionamiento profundo y de esta manera juzgar y negar a los demás y a ellos mismos, sin darse cuenta.


El juicio no es justicia sino su contrario

¿Es que el juicio podría ser un mito, que todos creemos cierto, que nos impide evolucionar en consciencia y de esta manera solucionar nuestros problemas sociales y personales con pasión y amor?

¿Fundamos ese mito, que la justicia era una decisión a tomar luego de cometer un acto? ¿Entonces, juzgar a la gente después de que una acción ha sido realizada y no de ser justos desde el comienzo en nuestras relaciones?

¿Cómo podemos ser conscientes de lo que es bien o mal, cuando desde nuestro nacimiento, la gente nos dice que hacer o no hacer, pero nunca nos dicen las consecuencias (sentimiento de bien o mal) al respecto y de esta manera dejarnos la libertad de elegir?

Y cuando algunas personas nos dicen las consecuencias posibles de nuestras acciones, jamás observan el mal que podemos hacernos, sino solo el mal a los demás.

Nadie en este planeta tiene la intención de hacerse daño conscientemente, eso es imposible, pero podemos olvidar de manera inconsciente.

De esta manera, llegamos a comprender que el bien y el mal está en las acciones y no en las consecuencias de esas acciones hacia los demás y hacía sí mismo.

Como consecuencia, nos olvidamos en esta relación, olvidamos nuestro poder de creador que está engendrado por nuestra motivación personal. Es por ese olvido, que casi todos vivimos inconscientes de nosotros mismos, de amarnos a nosotros mismos, de ver nuestra propia grandeza.

 

¿Qué elige ser en sus relaciones?

Pero eso hace parte del proceso de evolución de nuestra consciencia, ya que en ausencia de juicio, no podemos ser conscientes de su contrario, es decir, de lo que es justo. En ausencia de elección, ninguna elección consciente es posible, ya que cuando hay una sola posibilidad, entonces eso es un condicionamiento o un lavado de cerebro.

¿Por qué no utilizar esa consciencia de ser justos en sus relaciones familiares en lugar de juzgar? Los problemas sociales no son más que consecuencias de sus relaciones familiares que luego se extienden a su sociedad.

Para ser justos, solo tiene que amar lo que es juicio, ver su carácter ilusorio con el fin de ofrecerse una elección libre.

La justicia es ser justos, sin importar lo que usted hace y no de juzgar después de una acción hecha creyendo producir justicia.


El juicio impide a la gente crear la vida que desean, según ellos

 


Traductora, co-autora, y adaptadora de contenidos editoriales de sitios web, madre y esposa dedicada al hogar el cual hace parte de mi felicidad y me permite construir a cada día la vida que elegi ser como esposa, hacer como madre y tener como hogar. .

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