¿Es que los sistemas educativos nos ayudan a desarrollar nuestra manera de pensar?

¿Es que nuestro sistema de educación o el colegio está únicamente fundado en el desarrollo, en los niños, de recuerdos y no en descubrir y tomar consciencia de sus propias capacidades?

¿Por qué enseñar a nuestros hijos, y a nosotros mismos, de acordarnos constantemente de hechos pasados, ficciones y moralidades que cada sociedad o cada país ha establecido alrededor de ellos mismos, en lugar de ofrecerles libremente, la capacidad de descubrir y de crear su propia verdad?

De esta manera, nuestro sistema educativo enseña lo que debemos pensar, es decir memorizar y no de permitirnos pensar por nosotros mismos. La escuela nos da respuestas en lugar de preguntas con el fin de que usted descubra sus propias respuestas.

No propongo aquí eliminar el hecho de aprender a leer, escribir, hablar o contar como tampoco los aspectos tecnológicos y prácticos. Lo que, me parece, seria absurdo, ya que son muy útiles para nosotros, sino sobre los principios, valores o creencias escolares que son compartidos por el miedo y la culpabilidad a nuestros hijos. ¿Cuál es nuestra opción con respecto a la educación verdadera? No es una pregunta fundamental para mejorar las condiciones en nuestras relaciones y nuestras vidas?

Por favor, no empiece a juzgar, pero vea si es cierto. Ya que si usted porta un juicio o argumenta sobre este hecho, entonces su manera de pensar está bien condicionada en lo que busco a hacerle tomar consciencia, si su corazón así lo desea.

¿Sería posible para usted, no juzgar o argumentar durante unos minutos? Yo lo dudo fuertemente, pero intentemos igualmente, esperando que yo me equivoque!

¿Cuál es la razón de ser de la educación organizada tal y como es actualmente?

Si usted observa la educación tal y como es, usted verá que ésta se apoya en actividades bien definidas que incluso los que la controlan, no son conscientes, ya que ellos también pasaron por ese mismo sistema de condicionamiento:

Por lo tanto, la primera tarea de la educación organizada es hacerlo perder la confianza en usted mismo por medio del miedo y la culpa desde su infancia.
La segunda tarea es mostrarle que ella posee todas las respuestas que usted no tiene y que ella es la única fuente posible.
La tercera tarea es de hacerlo aceptar sus respuestas sin hacer preguntas, por obediencia.
Y cuarta, negar y destruir inconscientemente, todo lo que no encaja en lo que ya usted aprendió a cerca del tema.

De hecho, si usted hace preguntas, entonces su mente empieza a reflexionar, a pensar! Si usted piensa, usted puede tomar consciencia de su poder interior y así nunca más tener necesidad de ciertas cosas. Usted tiene deseos, pero la necesidad es algo que los obliga sin tener la posibilidad de elegir, o sea una dependencia.

Su educación y sus profesores no pueden permitirle eso, ya que usted puede encontrar una respuesta diferente de los sistemas educativos. Como consecuencia, su escuela debe absolutamente crear una duda en usted amenazándolo y juzgándolo con el fin de que usted pueda olvidar su propia capacidad de pensar claramente.

El problema, con la educación, es que a menudo, por no decir que siempre, los niños tienen miedo y entonces ellos niegan sus propios pensamientos.

Los programas y los profesores que piden a los niños desarrollar sus capacidades y sus talentos en vez de recordar o acumular palabras en su memoria sufren el ridículo de los que creen saber lo que un niño necesita aprender.

Pero lo que usted enseño a sus hijos a cerca de su manera de pensar ha llevado al mundo a la ignorancia, la dependencia, el conflicto y la guerra, en lugar de alejarse de ella.

¿Quién quisiera elegir su manera de pensar?

Si yo deseo aportar nuevos puntos de vista con el fin de crear juntos, relaciones más armoniosas, más unidas o relaciones más amorosas, entonces me parece urgente comprender o ver cómo hemos llegado a crear tantos conflictos, tantas divisiones, separaciones y guerras entre nosotros.

No podemos crear nuevas relaciones, si no tenemos en nosotros, esa pasión de ver las causas que han creado este mundo tal como es actualmente. De aceptar sin juzgar y no de disimular, esconder o negarlo, ya que de esta manera, no hacemos más que afianzar las mismas condiciones. Lo que nos resistimos, no hace más que mantenerlo en su lugar con más fuerza.

De hecho, esta causa debe ser comprendida profundamente y observo que ella está en esa falta de elección con respecto a nuestra manera de pensar donde nunca tuvimos elección consciente concerniente a nuestra herramienta que ha creado nuestra realidad conscientemente o no. Esa herramienta formidable de creación, que es nuestra mente.

Cada persona posee en ella, el poder absoluto de cambiar su realidad por medio de su propia verdad, que se manifiesta por medio de la libertad de elegir. Esa elección, que es la función, la razón de ser, de nuestra mente.

Y para comprender esta libertad de elegir, es necesario absolutamente tener la posibilidad de ver lo que esa libertad de elegir no es. Es necesario absolutamente ver, estar atento, que esa libertad de elegir no es el condicionamiento de nuestra mente.

Buenas noticias, tenemos esa elección observando el condicionamiento de nuestro pensamiento, de nuestra mente, que es lo que nuestra mente no es. Nuestra educación nos hace ese regalo de condicionar nuestra mente, sin darse cuenta.

De esta manera, ese condicionamiento de nuestro pensamiento abre el camino entre elegir lo que es (el condicionamiento) y lo que no es (un nuevo punto de vista contrario a ese condicionamiento). Así, usted tiene una opción aquí.

Seguir creyendo de utilizar ese condicionamiento de su pensamiento negando y juzgando todo lo que es nuevo o bien;

Creer que usted no tiene una opción entre el condicionamiento de su pensamiento y lo que es nuevo concerniente a una nueva manera de pensar.

La pregunta es:

Qué cree usted?

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Traductora, co-autora, y adaptadora de contenidos editoriales de sitios web, madre y esposa dedicada al hogar el cual hace parte de mi felicidad y me permite construir a cada día la vida que elegi ser como esposa, hacer como madre y tener como hogar. Diana Arellano.