¿Cómo vengarse de alguien y así detestarse más?

Que felicidad se encuentra en poder replicar a alguien que le ha hecho daño!
Cuán dulce es la venganza de herir a otro para obtener lo que usted cree que es la justicia!
¿Cree que hacer mal a otro, que estaba mal, sea una solución que le hace bien a usted?

Si su intención es la de vengarse para responder a un mal, entonces usted es como la mayoría de la gente en este planeta y usted contribuye activamente, sin darse cuenta, a crear conflictos y guerras interminables para así detestarse más. El amor de sí mismo pasa por la consciencia de sí mismo.
Pero algo me dice que usted es más inteligente y más consciente que esas personas instruidas bien intencionadas, pero mal informadas, que conocen todo en la vida excepto la suya.

Los demás no son conscientes y usted tampoco

La persona que les ha hecho mal, no era consciente de su reacción emotiva, entonces, ella quiso vengarse de usted o de alguien más que le hizo daño antes.

De esta manera, ella reacciona por venganza en total inconsciencia, creyendo que eso estaba bien, es decir, exactamente la misma reacción que usted inconscientemente. Ella cree hacer bien y usted cree hacer bien.

En realidad, eso no le hace bien a nadie!

El mal engendra el mal y el bien engendra el bien. Es la consciencia de eso, lo que nos libera de nuestros sentimientos incómodos, nuestros sentimientos desdichados y entonces podemos elegir aceptar y comprender la situación en lugar de reaccionar por hábito aprendido.

¿No le gustaría ser informado de algunos de sus errores que han herido a otra persona sin usted darse cuenta y de esa manera evitar su venganza? ¿Podría usted informar a los demás de sus sentimientos con respecto al mal que ha producido en su alma?

¿Qué es la venganza?

La venganza es una forma de condena para hacer pagar a otro por sus faltas cometidas y que le han herido a usted.

Pero aquel que ha cometido esas faltas, ¿ha reaccionado a una herida que usted le ha causado para vengarse? Eso no le hace bien a usted... y a él tampoco.

El mal produce siempre mal y si otro le ha hecho daño, es porque él no estaba bien. Su mal va a producir mal por medio de la venganza y es muy seguro que ese mal le regrese a usted.

Vengarse, es hacerse mal y detestarse.

¿Quién va a producir bien y de esta manera detener la continuación del mal? Usted tiene una gran oportunidad para crear el bien por medio del mal que otro le ha hecho en reacción a su propio mal.

La venganza no es la justicia, sino una reacción desagradable para herir a otro.

Las faltas no son más que consecuencias naturales de nuestras elecciones inconscientes teniendo en cuenta el sentido que damos a nuestras experiencias a realizar.

Pero viviendo en la inconsciencia de ese proceso continuo de experimentación, el juicio de los demás provoca en nosotros una culpa profunda y de esa manera nos odiamos.

El miedo al error nos empuja a hacer únicamente lo que ya hemos hecho con el fin de no ser juzgado.

Pero, ¿De dónde viene ese hábito de querer vengarse?

El problema de controlar sus emociones

Le han dicho que usted debe controlar sus emociones en lugar de comprenderlas y de esa manera expresarlas de manera natural.

Cuando alguien le hace daño, usted reacciona sin comprender primero en usted, lo que lanza su emoción. Esas son sus verdades, es decir, sus sentimientos de que usted debe ser consciente en lugar de reaccionar emocionalmente.

Si usted se siente mal, sería entonces muy sabio aceptar y comprender su sentimiento ya que el mal engendra el mal.

Pero como usted ha sido educado para contener sus emociones, controlarlas, cuando se enfrenta con situaciones difíciles, usted acumula en su espíritu, resentimientos que se transforman en emociones no naturales como la venganza.

Esa venganza no es una emoción natural, sino una emoción falsa por no haber expresado su ira sin hacer mal a los demás. Usted ha sido condicionado a controlar sus emociones en lugar de expresarlas y entonces usted busca la venganza.

La cólera es una emoción natural que expresa lo que usted es

La cólera es una emoción totalmente natural. Es el don que le permite decir "no gracias". Decir "basta de abusos", "no me gusta eso". Ella no debe ser ofensiva y jamás debe lastimar o hacer daño a nadie. Cuando los demás abusan de usted, la cólera le hace decir de parar, que es suficiente.

Cuando dejamos a los niños exteriorizar, afirmar o expresar su cólera, cuando llegan a la edad adulta, tienen un comportamiento muy sano al respecto y superan rápido su cólera.

Pero los niños a los que hacemos sentir que la cólera no está bien y que es malo expresarla e incluso que no beberían ni sentirla, tendrán problemas una vez adultos en comprenderla de una manera apropiada.

La cólera contenida sin cesar, controlada o manejada se convierte en venganza, histeria, violencia o rabia que no son emociones naturales.

Usted encerró, secuestró su cólera, ha retenido, controlado y de esta manera la ha cambiado a una emoción no natural, lo que ha creado divisiones, guerras, las desdichas en sus relaciones.

Su gente instruida, bien intencionada pero mal informada, por in condicionamiento de su pensamiento, le han hecho creer que debe medir, controlar sus emociones en lugar de comprenderlas y utilizarlas.

Su modelo es de no ceder a sus emociones, si usted sufre, conténgase. Si usted siente cólera, contrólela, sienta pena, pase por encima, contrólela, limítese, guárdela, no la acepte y evite por todos los medios de expresarla.

La gran dicha de no vengarse!

La venganza debe existir con el fin de permitirnos hacer una elección de experiencia entre la venganza y su contrario. Sin esa elección, usted no puede sentir la dicha, el orgullo de realmente saber lo que usted es.

La compasión o el amor del otro por medio del perdón sincero es una experiencia magnifica que le aporta, un sentimiento de bien y que lo libera de todas las ideas que pueden crear malestares en usted y en los demás.

Es su libertad elegir entre la venganza y el perdón sin buscar una forma de poder sobre el otro creyéndose superior a él.

El perdón es un sinónimo de aceptar y comprender la situación sin replicar ni vengarse.

¿Por qué esperar a que el otro se disculpe y buscar tener razón?

¿Por qué no actuar con benevolencia y compasión?

Traductora, co-autora, y adaptadora de contenidos editoriales de sitios web, madre y esposa dedicada al hogar el cual hace parte de mi felicidad y me permite construir a cada día la vida que elegi ser como esposa, hacer como madre y tener como hogar. Diana Arellano.