¿Cómo hacer para no ser rechazado al comienzo de una relación amorosa?

¿Está viviendo una relación amorosa donde su deseo es más serio, diferente del de la otra persona y le angustia un posible rechazo? ¿Puede transformar esa situación, esa relación, antes de que la realidad de separarse pueda manifestarse?

Muchas personas viven el inicio de una relación teniendo expectativas en el futuro que causa angustias y de esta manera olvidan lo que más cuenta, lo más importante, que es observar su propia manera de ser en una relación amorosa y no sólo observar lo que está haciendo y como está siendo. 

 

 

 

¿Ha sido usted educado a olvidarse en una relación de amor?

¿Se interesa sinceramente en usted mismo, a lo que pudiera hacerle bien a través de lo que hace bien a otras personas? ¿O bien usted se interesa únicamente en los demás en la medida en que esa persona le aporta algo que le hace bien?

Si su bienestar depende de lo que la otra persona es, hace o le da, entonces usted reacciona por hábito aprendido, por el miedo de perder eso o por la angustia de no obtenerlo. Ese miedo o esa angustia lo inmoviliza en la inacción o la duda y entonces las palabras hirientes y detestables son usadas a menudo para lograr sus fines. Como consecuencia, la relación se convierte en una obsesión egoísta y la otra persona buscará no estar más con usted.

Pero si su bienestar no depende que de usted, entonces usted actúa con acciones y palabras amables y reconfortantes que crean sentimientos de bienestar a la otra persona. Como resultado, el amor de la otra persona le regresará sin pedirle nada, ni exigirle nada.



Usted es libre y el otro igualmente

Imagine que usted está al inicio de una relación amorosa y que el otro le cuestiona sin cesar con el fin de saber lo que usted hace, con quién está y le ordena, lo juzga y lo critica. ¿Sentiría usted amor o una cierta manipulación que restringe su libertad?

Imagine que usted está al inicio de una relación amorosa y el otro se impone para estar con usted, intenta forzarle a estar con esa persona sin pedirle su permiso. ¿Sentiría amor o una cierta obligación que restringe su libertad?

Imagine que usted está al inicio de una relación amorosa y que la otra persona le exige que usted haga algo a cambio de otra cosa, es decir, que usted puede recibir su amor únicamente si usted le da algo como por ejemplo bienes o que usted cambie su comportamiento. ¿Sentiría amor o una cierta condición que restringe su libertad?

Imagine que usted está al inicio de una relación amorosa y que la otra persona busca controlarle, controlar a la gente con la cual usted está y que usted debe estar únicamente con esa persona. ¿Sentiría amor o un cierto celo o posesión que restringe su libertad?

Imagine que usted está al inicio de una relación amorosa y que la otra persona se interesa únicamente a su aspecto físico. ¿Sentiría usted amor o usted sentiría que solo es un objeto sexual que restringe su libertad?

Imagine que usted está al inicio de una relación amorosa con todas esas situaciones que le impiden estar bien, que restringen su libertad. ¿Tendría usted ganas de continuar esta nueva relación o usted la termina rápidamente imaginando todos los problemas que tendría que vivir con esa persona?

¿Puede usted observar ahora, si su comportamiento podría restringir la libertad del otro? Ya que si esto no le hace bien, entonces es evidente que eso no le hace bien a la otra persona.



Querer cambiar la realidad, es negar quién es usted

Usted no puede cambiar la realidad, corregirla, ya que ella es un resultado, una consecuencia natural que usted ha creado con relación a la consciencia de usted mismo y de las relaciones. Su enamorado o enamorada, no hace más que reaccionar a su comportamiento en la relación o reacciona según el comportamiento de otra persona.

Por el contrario, usted puede imaginar un nuevo sentimiento (un nuevo estado de ser) en usted, cuando usted acepta sin juicio, que ese sentimiento doloroso o incómodo es su propia creación y no que usted es víctima de las decisiones de otros. Los demás lo rechazan porque usted ha creado inconscientemente ese malestar a la otra persona buscando restringir su libertad para llegar a sus fines.

Cuando usted cree que son los demás que le han hecho eso, usted niega su poder creador y usted le deja el poder de su vida entre sus manos. ¿Es así como le gustaría vivir?

Cuando usted toma consciencia que usted puede cambiar su sentimiento por la aceptación, por la libertad de elección y su expresión, entonces usted puede crear sentimientos buenos en los demás y de esta manera llevarlos a hacer elecciones en función de su bienestar y eso le regresará.

Usted no tendrá la impresión de dar todo al otro, sino de darse también a sí mismo.

El verdadero cambio inicia aceptando la realidad tal y como es y aceptando el efecto, o sea el sentimiento, tal y como es.

 


Acepte la realidad y su sentimiento tal y como son y no según y cómo deberían ser

Todos nosotros hemos sido educados a negar la verdad, a negar nuestra verdad, nuestros sentimientos con el fin de que la gente en el poder pueda controlarnos por medio del juicio haciéndonos creer que la vida debería ser según lo que ellos quisieran que sea. Que esta vida sea en su ventaja.

Es así, por hábito, que vivimos. Pero cuando un problema se nos presenta en nuestra vida, reaccionamos a como la vida debería ser según nosotros, según nuestras expectativas, según los hábitos aprendidos y de esta manera multiplicamos los conflictos en nuestras relaciones.

Por lo tanto, es aceptando la vida tal y como es, aceptando nuestros sentimientos tal y como son, que amomos lo que somos y de esta manera amamos a los demás tal y como son. El cambio inicia aceptando la vida tal y como ella es y de esta manera traer a la existencia en nuestra imaginación, una nueva elección de ser y luego experimentarla o no.



Comprender quién es usted y quién es la otra persona

Vivir con expectativas donde usted no tiene ningún control es evidentemente el inicio del sufrimiento. Esas expectativas son lo que la vida debería ser según la educación recibida de gente que no tiene ninguna consciencia de ellos ni de las relaciones.

Así pues, usted entra en una relación amorosa con necesidades que quisiera satisfacer, deseos urgentes a realizar, condiciones a respetar, obligaciones a hacer, órdenes a seguir. Todo eso no es su naturaleza humana ni la de la otra persona. Todo eso impide la expresión de su libertad.

Es importante tomar consciencia, observar que su actitud en la relación empuja a la otra persona a rechazarle o estar con usted. De comprender también, que la otra persona puede elegir libremente la vida que quiere llevar con o sin usted.

Usted tiene el poder de cambiar su actitud o su manera de ser por medio de su imaginación, pero si la otra persona vive personalmente un sentimiento malo proveniente de su comportamiento, entonces será difícil que esa persona pueda cambiar esa memoria que no es la de su mente, sino la de su alma.

¿Elige usted ser amable, condescendiente, consoladora, feliz, comprensivo, atenta, etc., sin importar lo que hace? Y para hacer esa elección, usted debe ante todo comprender y aceptar los malestares que usted puede crear inconscientemente. Ya que en ausencia de elección, no es posible elegir.

Usted no tiene que hacer nada para que la otra persona no le rechace, sino observar su actitud en relación con la otra persona, sin importar lo que usted hace.

 

 

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Traductora, co-autora, y adaptadora de contenidos editoriales de sitios web, madre y esposa dedicada al hogar el cual hace parte de mi felicidad y me permite construir a cada día la vida que elegi ser como esposa, hacer como madre y tener como hogar. .